miércoles, 25 de noviembre de 2015



Mejores sistemas de accionamiento y tecnología de perforado conducen a un mejor corte de agujeros

Cuando las máquinas de corte láser de CO2 hicieron su gran debut en la escena de la metalmecánica en la década de los 80s, la gente se preguntó sobre el futuro de la punzonadora. ¿Cómo podría la tecnología del punzonado tradicional competir con una máquina herramienta que no requería herramental para crear agujeros y formas?
Pues bien, la historia ha mostrado que el corte con láser de CO2 no significó el fin del punzonado. De hecho, las punzonadoras de precisión siguen siendo la opción tecnológica para esos fabricantes que producen alto volumen de piezas con punzonados de tamaños consistentes. Por otro lado, han surgido las máquinas de corte láser como herramientas de fabricación más flexibles. Cada una contribuye de una manera única al éxito de un taller.
Pero conforme más fabricantes metalmecánicos buscan eliminar el manejo de material de partes durante la producción, éstos buscan llevar a cabo más tareas mientras que la pieza espera en la mesa de la máquina herramienta. Ésta es una de las razones de que los fabricantes estén presionando a sus máquinas de corte láser para que les brinden la más básica de las actividades de fabricación: el corte de agujeros.
Un fabricante de metales puede necesitar crear alguna hoja perforada, pero no tiene el volumen necesario para usar una punzonadora; en este caso, el láser puede cortar rápidamente los agujeros y concluir el trabajo. O quizás el taller quiera cortar agujeros con precisión para poder crear un agujero de lado a lado para algún tipo de pieza de soporte para el ensamble final; en este caso, la capacidad de la máquina de corte láser de brindar un agujero con una tolerancia estricta elimina actividades secundarias de taladrado corriente abajo.
Estas máquinas de fabricación modernas pueden hacer dichas tareas gracias a los avances en la tecnología de accionamiento, en las capacidades de perforado y en el software de control. No se trata de máquinas de hace 20 años, que podrían haber batallado con una alimentación inconsistente del rayo y con efectos del calor ambiental sobre la consistencia. Las máquinas de la actualidad están listas para la tarea completa de cortar agujeros en materiales delgados.
Accionamiento para cortar mejor
Si una máquina de corte láser va a producir un agujero con una tolerancia estricta, la cabeza de corte necesita estar en la posición correcta. “Mientras más preciso sea el posicionamiento de su rayo láser, más preciso será el agujero”. El mismo principio se aplica a las punzonadoras.
“De forma realista, sería lo mismo con una punzonadora, la precisión en el posicionamiento de la hoja a su vez se relaciona con la precisión de posicionamiento del agujero en la parte. Es cuestión de mover la cabeza de corte”, Durante muchos años, la tecnología de accionamiento por tornillo de bola impulsó la cabeza de corte sobre la cama de la máquina de corte láser. La tecnología resultó muy efectiva en posicionar con precisión la cabeza de corte donde necesitaba estar., En un equipo, se puso la precisión de posicionamiento del sistema accionado por tornillo de bola en aproximadamente ±0.0004 pulgadas.
“Pero no puede avanzar muy rápido, lo que no significa mucho al cortar, pero que de hecho la hace rebotar de un detalle de una parte a otro”,
Eso llevó a la adopción de sistemas de accionamiento de piñón y cremallera, lo cuales aumentaban las velocidades de avance, pero no podían ofrecer tanta precisión como la tecnología de tornillo de bola.
Sin embargo, durante los últimos 10 años, la industria ha introducido una nueva opción tecnológica de accionamientos lineales. Éste fue un importante paso adelante del uso de movimiento rotatorio hacia movimiento lineal.
A diferencia de un motor rotatorio, en el cual imanes interactúan con bobinas para girar la flecha repetidamente, un motor de accionamiento lineal tiene imanes alineados lado a lado a lo largo de una guía fija, que interactúan con devanados eléctricos en el componente móvil. Cuando la corriente fluye a través de los devanados, el componente se mueve a lo largo de la guía. El componente móvil mueve la carga, en este caso la cabeza de corte, a la posición deseada. Un codificador asegura la ubicación precisa de la cabeza de corte.
“Lo que los accionamientos lineales nos han permitido a nosotros y a otros más es disfrutar lo mejor de dos mundos. Son sumamente precisos y sumamente rápidos. El tiempo de respuesta ahora se mide en Gs de fuerza. Algunas máquinas son de hasta 3G o 4G en aceleración y desaceleración”,
Sin embargo, los sistemas de accionamiento lineal no son la única opción para los fabricantes metalmecánicos. Los sistemas de piñón y cremallera siguen usándose ampliamente por su confiabilidad y accesibilidad. De hecho, la tecnología sigue mejorando para responder a la velocidad de los láseres de estado sólido que se encuentran cada vez más en los talleres metalmecánicos.

Se introdujo un sistema de accionamiento patentado en 2011 que fue diseñado específicamente para corte con láser de fibra (vea la Figura 1). (En el corte con láser de fibra, se produce un rayo láser de estado sólido cuando los láseres de diodo emiten longitudes de onda electromagnética específicas hacia fibras ópticas, similares a los usados en la industria de las comunicaciones. La energía del láser que se crea en esas fibras ópticas se alimenta luego a través de una fibra óptica de transporte a la cabeza de corte). El posicionador de la cabeza de enfoque es accionado por un par de motores rotatorios, lo que permite que la cabeza de corte se mueva en una distancia de 17 cm. Esta estrategia de sub-ejes X-Y no es nueva para el corte con láser, más bien es diferente en el sentido de que la cabeza de corte no es cargada con el peso extra de un sistema de enfriamiento dedicado o con reglas ópticas.
Figura 1
La tecnología de movimiento rotatorio usada en los sistemas de accionamiento de las máquinas de corte láser no significa necesariamente un paso atrás de los accionamientos de movimiento lineal. La nueva tecnología de motores rotatorios está diseñada para ofrecer un desempeño similar al de los motores lineales, mientras que consume menos potencia cuando está en operación.
En realidad nosotros no cambiamos nada en los ejes principales X y Y. La cabeza de posicionamiento, debido a su peso ligero, puede acelerarse muy rápido. Esto de hecho elimina la necesidad de que los accionamientos lineales alcancen un alto desempeño al cortar esos nidos de láser que tienen muchos atributos muy cercanos entre sí. Ésta se mueve rápidamente por sí misma sin siquiera mover mucho los ejes principales.
La cabeza de corte puede alcanzar una aceleración hasta de 5G, que ayuda a cortar más partes por hora—incluso si esas partes tienen muchos agujeros.
Por lo tanto, las máquinas modernas de corte láser de la actualidad tienen sistemas de accionamiento que pueden tener la cabeza de corte en una posición precisa en un parpadeo, pero ¿qué ocurre cuando el láser está a punto de hacer ese corte inicial?
Entendiendo el perforado
Antes de que pueda hacer un agujero, el láser primero necesita perforar el metal. Ese paso establece la base para el resto del corte.
Durante muchos años los fabricantes metalmecánicos tuvieron que confiar en el perforado por pasos o intermitente para producir agujeros precisos. La cabeza de corte se quedaba en un punto hasta que el láser cortaba el material. Desafortunadamente, esto tardaba varios segundos; para materiales gruesos, podía tardar hasta 25 segundos. Además, el prolongado proceso de corte exponía el material a mucho calor, lo que aumentaba el riesgo de cambios metalúrgicos.
Más tarde, los constructores de máquinas herramienta introdujeron el concepto de perforado con granalla. El resonador se puso a potencia máxima, y el disparador se abrió para liberar una poderosa ráfaga de energía.
Atraviesa bien el material.
Desafortunadamente, este chorro de granalla creaba un efecto volcánico, donde metal fundido fluía y dejaba salpicadura por toda la hoja metálica. La gran liberación de potencia láser también producía cráteres, lo que no mejoraba en nada la capacidad de la tecnología de hacer agujeros pequeños y precisos.
La tecnología de control avanzada ayudó a refinar la potencia de perforado de las máquinas de corte modernas. Ahora se usan sensores para detectar cuando se necesita un aumento o una reducción de la potencia láser para producir una perforación limpia y rápida (vea la Figura 2).
Figura 2
Esta pieza de ejemplo muestra la diferencia entre el perforado por granalla clásico (izquierda) y el perforado hecho con la ayuda de sensores avanzados que pueden detectan cuándo aumentar o reducir la potencia láser (derecha).

Lo que los sensores están haciendo ahora es que en realidad están monitoreando la deflexión del rayo. Cuando la deflexión del rayo está aumentando, bajamos la potencia láser. Y si hay una pequeña deflexión del rayo, entonces la subimos.
Esto nos da la oportunidad de hacer agujeros más pequeños incluso en materiales más gruesos”, “Y no sólo de hacerlo, sino hacerlo de manera consistente y repetitiva, lo cual es la clave para la producción.
Este enfoque ha ayudado a limitar esa cantidad de deformación del material que podría ocurrir en la pieza de hoja metálica, debido a que el material ya no está expuesto al calor por un tiempo prolongado.
De hecho, estamos obteniendo agujeros tan precisos como los que obteníamos con perforado por pasos, o incluso más precisos, pero a las velocidades del perforado con granalla.
Otro descubrimiento reciente ha sido la introducción del perforado sobre la marcha. En lugar de que la cabeza de corte perfore el material en medio del agujero que se pretende hacer, la perforación se hace directamente sobre el contorno del agujero con la cabeza de corte a plena velocidad.
Este enfoque es adecuado cuando un fabricante metalmecánico desea hacer el número máximo de agujeros en una cantidad mínima de tiempo. La perforación sobre la marcha sí reduce en cierta forma la calidad del agujero, debido a que la perforación ocurre en el borde del agujero, pero es muy probable que el fabricante metalmecánico que prefiere este tipo de perforación esté más interesado en la velocidad que en la calidad del agujero.
El equilibrio entre velocidad y calidad
En cierto modo, la misma interrogante que existía hace más de 25 años existe ahora. Los avances en la tecnología de los sistemas de accionamiento, de perforado e incluso de control, permiten a las máquinas de corte láser brindar un buen desempeño en el corte de agujeros, pero si el taller metalmecánico excede los límites de la máquina, la calidad global puede verse afectada.
Existe un entendimiento de que hay una toma y dar en un proceso de manufactura, para lograr consistencia, tienen que devolverse otras cosas. Por otro lado, cuando usted renuncia a esa consistencia, regresa lo demás, velocidad y procesamiento. Usted tiene que sopesar una cosa contra la otra.
Las máquinas de corte láser pueden hacer cosas extraordinarias, especialmente en comparación con la tecnología 10 años más vieja; pero no están diseñadas para exceder las especificaciones del fabricante de la máquina de corte láser por tiempos prolongados. Por eso, si un arco azul está presente durante el corte de agujeros con nitrógeno o si hay chisporroteo excesivo durante el corte, es posible que el operador sólo quiera desacelerar.
La fibra encuentra su camino
La regla generalmente aceptada en el corte de agujeros es que el tamaño mínimo del agujero no debe ser menor al espesor del material.
 Lo que hemos encontrado con el láser de fibra es que podemos bajarnos a un cuarto del espesor del material. Es difícil, por ejemplo en material de 0.5 pulgadas, medir la calidad del agujero cuando se trata de tamaños tan pequeños.
Y ciertamente el cliente tendrá que decidir si ése es un agujero suficientemente bueno.
Pero estamos haciendo agujeros bastante decentes, hasta de 3 mm en material de 12 mm. Es un agujero recto.
El corte con láser de fibra parece evitar los problemas de producir plasma durante el corte con nitrógeno debido a su longitud de onda. Un rayo láser generado por fibra tiene una longitud de onda de 1.064 micrones; un rayo láser generado por resonador de CO2 tiene una longitud de onda de 10.6 micrones.
Esto probablemente ocurre más con materiales más delgados, por decir calibre 11 o menor. Usted obtiene plasma [con corte por láser de CO2], tantas veces que tiene que reducir su flujo de gas para ayudar a reducir ese tamaño de plasma. Entonces, cuando empieza a cortar tiene que aumentar su flujo de gas. Por supuesto, todo esto lleva tiempo.
Con el láser de fibra, el plasma no afecta al láser debido a la longitud de onda. Toda la energía del láser de fibra sigue pasando a través del plasma, por lo que en realidad no afecta sus parámetros de corte. Así que usted ahorra tiempo porque mantiene consistente la presión del gas.

EL TORCHADO POR PLASMA





El acanalado con arco de plasma tiene amplias capacidades en aplicaciones industriales, incluyendo construcción de barcos y mantenimiento; manufactura y reparación de equipo pesado; y manufactura de carrocerías de camión, tanques, estructuras de acero y eliminación de cordones de soldadura. Puede remover refuerzos, orejas de levantamiento, abrazaderas temporales, soldaduras preliminares de puntos y remaches, y puede usarse para demolición u operaciones de recuperación.
En fundiciones, remueve el exceso de material de las piezas fundidas. Proporciona un medio de fijar y mantener puentes, equipo pesado y tuberías, pero además es útil para remover fracturas e imperfecciones de la soldadura y preparar bordes de placa para soldadura mediante la remoción de metal extra que pudiera estar sobre la placa.
Actualmente, más soldadores se están dando cuenta de los beneficios de usar la tecnología de plasma para hacer aplicaciones de acanalado de rutina, y es fácil entender el porqué. El acanalado por plasma es una forma rápida, simple y silenciosa de remover metal. Actualmente se usan cuatro métodos diferentes de acanalado de manera común: mecánico, oxicombustible, arco de carbón y plasma.
El rectificado mecánico puede implicar rectificado manual, fresado manual, rebajado o cincelado.
El acanalado por oxicombustible implica el uso de gas combustible para calentar acero a su temperatura de ignición. Una vez que el metal está en su punto, éste se quema rápidamente, luego es soplado por un chorro de gas oxígeno. Su uso se limita a acero al carbón.
En el proceso de acanalado por arco de carbón, se genera un arco eléctrico entre la punta de un electrodo de carbón y la pieza metálica. Luego se dirige un chorro de aire alrededor de la punta para eliminar metal fundido del área, formando una ranura. Este proceso es versátil porque puede aplicarse a acero suave, hierro fundido, aleaciones de níquel, cobre y aluminio.

El método final es el acanalado por plasma. Como en el corte por plasma, el proceso de acanalado por plasma (vea la Figura 1) usa un chorro angosto de gas a alta temperatura para fundir el metal. Es relativamente silencioso y no causa humo excesivo. Con un poco de práctica es posible lograr un canal liso, limpio y consistente. Y tal como su contra-parte de corte, el acanalado por plasma puede hacerse en acero suave, acero inoxidable, aluminio y cobre.

Figura 1
Cada vez más soldadores se están dando cuenta de los beneficios de usar la tecnología de plasma para hacer aplicaciones de torchado y acanalado de rutina.-
La tecnología detrás del acanalado por plasma
El acanalado por plasma funciona de manera similar al corte por plasma (vea la Figura 2). En el corte por plasma, se forma un arco de plasma entre un electrodo cargado negativamente dentro de la antorcha y una pieza de trabajo cargada positivamente. El calor del arco transferido funde rápidamente el metal, y un chorro de gas a alta velocidad aparta el material fundido. El proceso es casi idéntico para el acanalado; la única diferencia es que usted elimina sólo parte del material sosteniendo la antorcha a un ángulo y usando consumibles específicos para acanalado que están diseñados para producir un arco más ancho y más suave. Además, muchos sistemas de plasma tienen un modo de operación exclusivo para acanalado, lo que permite que el arco se estire sin extinguirse. Algunos fabricantes incluyen consumibles para acanalado en el kit inicial con máquinas nuevas.
Figura 2
Tal como con el corte con plasma, el acanalado con plasma puede hacerse en acero suave, acero inoxidable, aluminio y cobre.
El corte y el acanalado por plasma requieren casi el mismo equipo. Para acanalado manual, todo lo que necesita es un sistema de plasma que consta de una fuente de energía, un suministro de gas (con frecuencia simplemente aire), una antorcha y alambre. Tablas e instrucciones de corte en el manual del operador explican los parámetros de operación, seguridad, y partes para el acanalado. Muchos fabricantes suministran accesorios diseñados específicamente para el acanalado, como escudos metálicos contra calor para rodear y proteger sus manos, y protectores de piel para cable. Éstos generalmente no vienen como partes estándar con un equipo nuevo, pero vale la pena invertir en ellos si usted espera hacer mucho acanalado.
Pueden usarse varios gases diferentes de protección y plasma—que incluyen aire, nitrógeno, oxígeno, una mezcla de argón/hidrógeno y otras combinaciones—para el acanalado con plasma. Primero debe consultar el manual del operador sólo para asegurarse de que el gas que desea usar sea compatible con su sistema de plasma en particular. Hay algunas reglas a seguir que le ayudarán a decidir qué gas usar.
·    El plasma de aire da el menor costo de operación y una calidad aceptable en acero suave, inoxidable y aluminio.
·    Una mezcla de argón/hidrógeno puede producir un canal limpio, brillante y suave en aluminio y acero inoxidable.
·    El gas nitrógeno es bueno para alargar la vida de sus consumibles.
Las antorchas modernas de plasma de aire brindan buenas características de enfriamiento, altas capacidades de corte, larga vida de los consumibles y una calidad consistente del canal, atributos que mejoran el desempeño del acanalado y permiten un proceso de acanalado más controlado. Otra característica de las antorchas modernas de plasma de aire es su diseño.
En el pasado, todas las antorchas de plasma manuales estaban diseñadas con un ángulo de 75 o 90 grados. Actualmente, existen antorchas rectas que brindan diversas opciones para satisfacer diferentes necesidades ergonómicas. Algunos sistemas de plasma incluyen una  función de des-conexión rápida que facilita el cambio entre las diferentes antorchas. Por ejemplo, usted puede tener dos antorchas una antorcha estándar de 75 a 90 grados con consumibles para corte y una antorcha recta, lista con consumibles para acanalado—y luego cambiar rápida y fácilmente entre estas dos, dependiendo del trabajo en cuestión.
 Técnicas de acanalado
Los operadores usan diversas técnicas para lograr diferentes perfiles y tamaños de canal, ya sea que acanalen a mano o usando un método mecanizado como un cortador de riel. La forma más común implica posicionar la antorcha a un ángulo de 40 a 60 grados con respecto a la superficie de trabajo mientras que el arco piloto se forma y transfiere hacia la placa.
Una vez que usted ha hecho contacto, simplemente apunte o alimente el arco hacia el área que desea acanalar mientras mueve la antorcha hacia adelante. Se usan variaciones en el ángulo y velocidad de la antorcha junto con los niveles de amperaje para controlar la profundidad del acanalado. Un ángulo de antorcha más empinado y un movimiento de avance lento forman un ángulo de canal más profundo, mientras que un menor ángulo de antorcha y un movimiento de avance más rápido forman un ángulo de canal poco profundo.